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Ito, autor del gol de la victoria frente al Langreo, podría recuperar el puesto de titular en la delentera del Avilés para recibir al Astorga.
El partido definitivo para el Avilés

El partido definitivo para el Avilés

Barla pide a sus pupilos la misma intensidad con la que se emplearon en la anterior cita en casa y también cabeza fría para manejar la situación

NACHO GUTIÉRREZ

Sábado, 25 de abril 2015, 23:03

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El de hoy (18 horas, Suárez Puerta) debe ser el partido definitivo para que el Real Avilés despeje el panorama y se acerque a una permanencia que, ineludiblemente, pasa por sumar los tres puntos en la visita del Astorga al feudo blanquiazul. Las cuentas no saldrán todavía, pero por muy poco, y en cambio una derrota pondría al conjunto avilesino al pie de los caballos, según lo que suceda en otros campos, cuando por delante restarán únicamente tres jornadas para terminar este doloroso campeonato.

Un partido que es como una final, para seguir el argumento de las últimas semanas. Y es que si a los locales les va casi todo en esta cita, aún tienen un margen de maniobra, que es dos puntos menor en el caso de un equipo maragato que puede caer esta tarde en las garras del descenso, si se combinan los resultados necesarios para ello dentro un grupo de varios implicados en la misma lucha que se dirime este último domingo de abril.

Para esta confrontación de tanto peso específico las altas y bajas en ambos equipos conceden ventaja al Avilés, en el que José Manuel Barla recupera efectivos y puede contar con todo su arsenal, algo que no le sucede al técnico del Astorga, Pepe Calvo, quien lamenta como nadie la baja por sanción de su máximo realizador, Borjas Martín, que firma catorce dianas.

El decorado del encuentro tiene las mismas trazas que el vivido hace junto quince días cuanto por el Suárez Puerta se la jugaban el Avilés y el Langreo. Aunque los rivales no se parecen en casi nada en cuanto a su estilo de juego, la necesidad de sumar puntos, aunque solo sea uno, es lo que marca. Barla ha pedido al personal que maneja junto a John Clarkson «la misma actitud que mostramos ante el Langreo, pero con la cabeza fría que evite cometer errores graves y tener paciencia para esperar nuestro momento de aprovechar la ocasión». Junto a esas instrucciones básicas y que el gaditano reconoce como «difíciles de hacer en estas situaciones de necesidad», pone toda su confianza en una plantilla «comprometida» y en la que hay muchas tablas.

Los propios futbolistas tienen asumido que son ellos quienes deben sacar al equipo adelante después de una temporada llena de cambios en el banquillo, lo que equivale a inestabilidad. Y a ese respecto Barla trata de aplicar su experiencia con una aparente tranquilidad en la que el gaditano trata de que impere el sentido común: «Los chavales saben lo que está en juego, tienen carácter y calidad de sobra para salir adelante».

Mismo dibujo

Tras lo visto hace quince días, en el actual cuerpo técnico se ha vuelto al estilo implantado por Uribe hace año y medio porque es al que está moldeado el equipo: acogotar al rival en la presión para salir a la contra buscando la calidad de Álex Arias y la velocidad de los jugadores de ataque, Jandro y Omar en los costados, Ito o José Mari en la punta. Geni, Zazo y los cuatro de atrás tendrán que bregar para que la portería no sufra demasiado.

A esto último ayudará la ausencia en el equipo berciano del goleador Borjas, sancionado por acumulación de tarjetas amarillas y que se queda en casa con sus catorce dianas. Una baja que, sin duda, agradecen los defensas blanquiazules, aunque el Astorga, en sus formas, es ofensivo, de buen trato y manejo de balón. Los maragatos bordean el descenso a su hábitat habitual de Tercera, pero se rebelan para prolongar su estrenada estancia en Segunda B desde su vocación goleadora, con la que son el sexto equipo más realizador del grupo con 46 tantos... 16 más que un pobre Avilés, el penúltimo en la tabla realizadora.

Vigilar ese talante del conjunto leonés ha sido una de las consignas esta semana en las sesiones de entrenamiento, pero también aprovechar la otra cara del Astorga, la defensiva, que es la segunda peor del grupo, compartida con el Celta B, con 52 goles recibidos.

El 'rey' del empate

El conjunto leonés también ha cambiado de entrenador, en su caso una sola vez, y Pepe Calvo mantendrá en el Suárez Puerta su esquema, 4-2-3-1 como el Avilés, aunque quizás no se permita excesivas alegrías ofensivas en este partido mientras el conjunto local no se adelante en el marcador.

Según se ha dicho en el seno del equipo maragato, lo único que no vale es la derrota y un punto serviría para, al menos, no caer en puesto de descenso. Un resultado, el de empate, al que está acostumbrado el Astorga, que es el 'rey' con catorce igualadas

Calvo tiene para esta final de Avilés la importante ausencia de su mejor rematador, pero recupera a otros dos imprescindibles, Taranilla y el veloz Ivi Vales, que fue duda hasta el viernes. La baja del nueve habitual será cubierta por Roberto Puente.

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